20 de agosto de 2009

De robot anticuado a humano racional


Solo intentaba ser una persona normal, igual que el resto de los mortales, pero era imposible. Tenía demasiadas dudas y demasiado miedo para actuar sin pensar las cosas cientos de veces antes de hacerlas, lo cual restaba naturalidad a sus actos, y le hacía pasar por duros momentos de angustia. Siempre pensó que no necesitaba que nadie lo aconsejara, que nadie le diese su opinión sobre sus actos, pero esto no era más que una farsa, al igual que el resto de su vida. Necesitaba a un buen amigo, al igual que necesita el aire para respirar. Necesitaba desahogarse, contar todo lo que estaba viviendo, necesitaba que le dijesen que lo que le estaba pasando era lo normal, que no había ningún problema, que todo saldría bien. Necesitaba los sabios consejos de una persona cercana, de alguien que le conocía como a la palma de su mano. Y esos deseos se cumplieron, alguien lo escuchó atentamente y lo aconsejo de la mejor manera posible. Ahora solo quedaba aplicar esos consejos a la práctica y dejar de vivir de aquella manera artificial, abandonar su vida de robot anticuado, dejar de ser una maquina, convertirse en un ser humano racional. Aunque este cambio de maquina a persona le costase la vida, sería capaz de superarlo, al igual que había superado otras cosas en su corta vida.

1 comentario:

Anónimo dijo...

...........................................................................................................